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Si tienes el cabello dañado, es probable que hayas oído hablar de lacutícula capilar. Repararla y mantenerla es crucial para obtener el cabello suave, sedoso y sano de tus sueños... pero ¿qué es exactamente?
En esta guía responderemos a todas tus preguntas urgentes, desde explicar qué es la cutícula capilar hasta describir los signos de una cutícula capilar dañada, además de compartir formas de tratar y reparar la tuya. Un pelo sano y bonito está más cerca de lo que crees.
¿Qué es la cutícula capilar?
En primer lugar, cubramos las bases. Las hebras del cabello están formadas por varias capas que ofrecen protección, estructura, fuerza, elasticidad y pigmento.
La cutícula es la capa más externa. Es responsable de proteger las capas internas de los elementos, proporcionar brillo y mantener la humedad dentro de la hebra. Al ser la capa externa, también es la más propensa a sufrir daños.
¿Qué aspecto tiene una cutícula capilar dañada?
La cutícula del cabello está formada por proteínas de queratina superpuestas, como las tejas del tejado.
Una cutícula capilar sana tendrá proteínas estrechamente unidas y planas, creando un cabello suave y sin encrespamiento. También proporciona más brillo, ya que la luz se refleja más fácilmente en una superficie lisa que en una áspera. Por último, las hebras con cutículas capilares sanas estarán bien hidratadas, ya que la humedad está sellada de forma segura en las capas internas.
Si la cutícula del cabello está dañada, las proteínas de queratina empiezan a agrietarse y levantarse, lo que da lugar a una superficie irregular que permite que la humedad se escape fácilmente. Por eso el cabello dañado suele tener un aspecto apagado, encrespado y áspero.
Signos comunes de una cutícula capilar dañada
- Aspecto apagado y sin vida
- Encrespamiento y enredos
- Sequedad y textura áspera
- Puntas abiertas y rotura
Causas comunes del daño capilar
- Daños mecánicos: técnica de cepillado incorrecta, elección incorrecta de lazos y/o accesorios para el cabello, fricción general.
- Daños por calor: herramientas para el cabello basadas en el calor, como planchas, rizadores y secadores.
- Daños químicos: decoloración, tintes y/o tratamientos químicos para el cabello.
- Daños causados por el estilo de vida: dieta, edad y hábitos de peinado
¿Se puede reparar una cutícula capilar dañada?
No te preocupes si sientes que las cutículas de tu pelo están dañadas. Es algo habitual que nos ocurre a todos. La buena noticia es que puedes mejorar la salud de tu cabello con los cuidados y el mantenimiento adecuados.
Cómo tratar una cutícula capilar dañada
Elige los productos adecuados: Asegúrate de utilizar champús, acondicionadores y otros productos con ingredientes nutritivos como proteínas de seda, queratina, ceramidas, ácidos grasos y humectantes. Evita los ingredientes que puedan despojar al cabello de su grasa natural, como los sulfatos, los alcoholes y los parabenos. Puedes ampliar tu rutina con tratamientos hidratantes diarios como acondicionadores sin aclarado y mascarillas semanales de acondicionamiento profundo.
- Los tratamientos reparadores son ideales para el cabello dañado químicamente.
- Los tratamientos con aceite caliente pueden ayudar a sellar y alisar la cutícula.
- Los tratamientos con proteínas serán beneficiosos para fortalecer el cabello debilitado.
Adapta tu rutina de cuidados: Busca formas más suaves de tratar tu cabello. Esto podría significar...
- Invierte en un cepillo de cerdas de jabalí: Estos cepillos de origen natural son suaves con el pelo, pueden desenredar sin demasiados tirones y contienen de forma natural queratina que nutre tu cabello.
- Pásate a las gomas de pelo y fundas de almohada de seda: La seda es otro material natural beneficioso para el cabello. Se compone de las mismas proteínas que el pelo, por lo que ambos son naturalmente compatibles. Además, su textura suave es delicada con el cabello y reduce la fricción, al tiempo que ayuda a retener la humedad.
- Limitar la exposición al calor: Intenta lavarte el pelo con temperaturas más frescas, limita el uso de herramientas calientes y asegúrate de protegerlo de los rayos solares con sombreros o productos especializados.
- Limitar la exposición a productos químicos: es posible que tengas que dejar de utilizar tintes u otros tratamientos químicos mientras tu cabello se cura.
- Recorta el pelo con regularidad: Recorta el pelo con regularidad para eliminar las puntas abiertas y prevenir daños mayores. La mayoría de los estilistas recomiendan recortar el pelo cada 6-12 semanas, según el tipo y la longitud del cabello. Si tienes el pelo largo y grueso, puedes esperar más tiempo, mientras que si lo tienes corto y fino, deberás acudir con más frecuencia. Si la cutícula de tu pelo está muy dañada, es mejor que te hagas un corte radical para empezar de cero.
Mantén un estilo de vida saludable: Tu estilo de vida también puede influir en la salud de tu cabello. Asegúrate de seguir una dieta rica en vitaminas como la biotina y ácidos grasos omega-3, beneficiosos para un pelo sano.
Sé constante: Sanar el cabello dañado lleva tiempo y es un esfuerzo continuo. Es posible que algunos de los cambios y ajustes que hagas deban ser permanentes.
Conclusión - Cómo reparar una cutícula capilar dañada
Una cutícula capilar dañada puede ser una fuente importante de descontento para ti, pero no tiene por qué ser el fin del mundo. Puedes volver a tener un pelo suave, brillante y sano adoptando una rutina suave y nutritiva y siendo constante.
